Mastectomía doble

Luego de la mastectomía, me siento más sexi. Me probé mis vestidos escotados y todos lucen bien. Lo sexi es algo mental.

El paraiso existe

No sé si llamarlo paraíso o realidad, pero existe y es en Ucubamba. Es una zona ubicada a 10 minutos de la ciudad de Cuenca en donde mi suegra construyó una cabaña. Es un lugar hermoso. Rodeado de montañas. Una entrada con árboles, una laguna. Ahora que es invierno todo es verde. El otro día sembré unas semillas de perejil y están creciendo. Me gusta remover la tierra y sacar las malas hierbas. Es el mejor lugar del mundo. Creo que es otro regalo más de Dios. Puedo disfrutar junto a mis hijos y mis perros. No les conté... tengo dos rottweilers y un schnauzer. Sus nombres son Tiberio, Bagdad y Motor. El domingo llegó un perro más, es cachorro, es blanco con ojos azules. No le puedo pedir más a Dios ni a la vida. Siempre quiero que pase volando la semana para llegar a la realidad. Ahora que vamos a montar una piscina armable, se acerca más a la perfección que debe tener el paraíso. Todavía no tiene luz y eso la hace más maravillosa porque te puedes desconectar. Nunca pensé que se pudiera ser tan feliz.

Radioterapia

El estar expuesta a las miradas del equipo médico fue la peor parte de la radioterapia. Eso sí, una vez pasada la simulación y trazadas las líneas definitivas, cada sesión dura máximo diez minutos. En el programa se anotan todas posiciones de la máquina y los láseres de luz deben coincidir exactamente con las rayas de marcador permanente sobre la piel. Mientras más se cuiden las marcas, mejor. Todavía no se sentido ningún síntoma, salvo mucha sed.

Rehabilitar el brazo para la radio

Después de la cirugía me quedé con limitada movilidad del brazo derecho y me dijeron que era indispensable la movilidad para el tratamiento de radioterapia. Así que en una semana contraré a dos rehabilitadoras o fisioterapistas una por la mañana y otra por las tardes. Cada quien con su método. Una a base de ejercicios fuertes, estiramiento y mucho dolor en las posiciones extremas. La otra con música relajante, calor y pocos movimientos. Entonces todo lo que me dolía con la una, la otra me relajaba.

Simulación de la Radioterapia

Asistí a la simulación de la radioterapia a las 07h00 en ayunas. Nadie me dijo que coma ni que no coma. Me atendieron a las once. Una hora en esa posición, de Cristo crucificado. Muchos ojos mirando, midiendo marcando. Luego el Doctor Víctor dice: le gustan los tatuajes? Le contesto: No. Le vamos a hacer unos. Luego los láseres y finalmente los sonidos. Antes de terminar con un marcador permanente dibujan sobre la piel, el perfil de la ciudad. Ja ja